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¡Ya son marido y mujer! Sergio Ramos y Pilar Rubio se han dado el 'sí, quiero' en una romántica ceremonia en la Catedral de Sevilla. Hasta la capital hispalense se han desplazado más de 500 invitados para compartir el día más especial de la pareja, que también ha estado rodeada de centenas de curiosos que se han congregado a las puertas del histórico edificio ansiosos por descubrir todos los detalles del enlace. Sin duda, el look más esperado, como en cada boda, era el de la novia, y la presentadora no ha defraudado. La presentadora ha impactado con su vestido de Zuhair Murad, una pieza inspirada en el movimiento Art Decó de la década de 1930 confeccionada en un tejido de aplicaciones y pequeños cristales que conformaban un patrón geométrico y aportaban una estética muy festiva. Sin embargo, no solo ha sorprendido su fabulosa elección de vestuario, sino que su peinado ha generado numerosos comentarios, al igual que lo ha hecho el de su ya marido.
Pilar ha presumido de piel jugosa, muy hidratada y bronceada, que creaba un favorecedor contraste con el vestido, de color blanco impoluto como es tradición. Ha apostado por maquillaje en tonos tierra, que potenciaba la luminosidad de su tez. Como base, una elección muy natural, sobre la que remarcaba sus pómulos con colorete anaranjado, aunque sin duda los protagonistas han sido sus característicos ojos claros. Ha lucido un discreto ahumado en rojizo y, como es habitual, ha delineado su mirada con un potente eyeliner negro. En cuanto a los labios, ha elegido un color anaranjado con efecto satinado, una tonalidad menos intensa a las que suele escoger en su día a día.
Sin embargo, lo más destacado del beauty look ha sido el rompedor peinado de Pilar, quien ha huido de las opciones tradicionales. Ni ondas al agua, ni coleta baja ni moño messy, la colaboradora de El Hormiguero ha optado por una estética mucho más rompedora y hippy.
Ha recogido su melena en trenzas de distintos tamaños, luciendo una más ancha bajo el velo y dos pequeñas hacia delante, decorando el escote. Además, las ha coronado con pequeños abalorios transparentes incrustados, haciendo juego con el vestido.
Aunque la gran mayoría de las miradas estaban puestas en Pilar, el look de Sergio no se ha quedado atrás. Además de innovar con su chaqué de cuadros, que ha combinado con camisa blanca y corbata de estampado azulejo, también ha querido cederle importancia a su cabello y su barba. El futbolista del Real Madrid ha aclarado ligeramente su tono de pelo con un discreto degradado, iluminando ligeramente el flequillo hacia la paleta más cobriza pero manteniendo su habitual castaño en la nuca. Como peinado, ha lucido un tupé con movimiento que despejaba su rostro. También ha recortado su barba, dotándola de un aspecto muy natural pero cuidado.
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