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La limpieza facial es uno de los pasos más importantes de nuestra rutina y, desde que descubrimos la doble limpieza coreana, somos más conscientes de lo fundamental que es si queremos tener una piel sana y bonita. Desmaquillarnos y limpiar nuestro rostro, en verano más que nunca, es básico para cuidar la piel de nuestra cara. "Si no nos desmaquillamos correctamente tenemos dos problemas principales: por un lado, al quedar residuos en la superficie, los productos que empleamos después en nuestra rutina de noche, no van a absorberse correctamente y, por lo tanto, serán menos efectivos. En segundo lugar, el maquillaje que no se elimina bien, actúa como un elemento irritante para nuestra piel y determina que tengamos una alteración de nuestra función barrera, lo cual puede dar lugar a la presencia de una piel reactiva", explica la Dra. Natalia Jiménez, Dermatóloga colaboradora de BIODERMA. Por eso tenemos que ser conscientes de que este paso no nos lo podemos saltar.
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Tanto si tienes la piel con tendencia grasa o seca, solo tienes que adecuar los productos que necesitas para hacer una correcta higiene facial. Encuentra el limpiador facial que mejor va con tu tipo de piel y, si tienes la piel seca, puedes recurrir a este truco que siguen las coreanas para mantenerla más hidratada que nunca. Se conoce como el método Toner Wash y promete unos resultados mejores incluso que la doble limpieza: una piel más lisa, jugosa e hidratada.
Los expertos de Primor cuentan que "utilizar el tónico es un paso fundamental dentro de la rutina facial porque ayuda a equilibrar el pH de la piel que suele aumentar después de la limpieza. Además, los tónicos de última generación contienen humectantes que son necesarios para mantener la piel hidratada y aportan la dosis justa de antioxidantes para calmar y proteger la piel. Si usas un buen tónico, necesitarás aplicar menos hidratante".
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Cómo probar el Toner Wash Method
Una vez hayamos hecho la doble limpieza facial -recordemos, primero con un limpiador de base en aceite y después otro con base jabonosa-, seguiremos este paso. "Hay que mezclar el tónico con agua, en una proporción de 9 partes de agua y 2 de tónico. Es decir, una vez limpia la cara, la volvemos a lavar con esa mezcla, para tratar la piel y dejarla mucho más hidratada. Una vez que el rostro quede seco, podremos continuar con nuestra rutina", explican desde Primor.
Tras este ritual, tu piel tendrá un extra de hidratación para recibir mejor el tratamiento que apliques después. Recuerda que, por el día, se recomienda el uso de vitamina C, hidratante y protector solar, mientras que por la noche, puedes cambiar el tratamiento por retinol -si así te lo aconseja tu dermatólogo- y una buena crema hidratante para cuidar nuestra piel.
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