Ingredientes
- 2 ud calabacín grandes
- 2 ud aguacate
- 1 dientes dientes de ajo
- 1 ud zumo de lima
- 200 g queso cremoso de untar bajo en grasa
- 1 ud guindilla picada
- 80 g semillas de sésamo blanco tostadas
- Sal
- Pimienta negra
Preparación
- Corta cada calabacín en sentido longitudinal en cuatro láminas con ayuda de una mandolina.
- Escalda las láminas en una cazuela con agua salada 10 segundos.
- Escúrrelas, refréscalas en agua helada y sécalas con papel absorbente.
- Pela y pica el ajo.
- Pela los aguacates, retira el hueso y echa la carne en un cuenco con el zumo de lima, el ajo picado, 2 cucharadas soperas de agua templada, una pizca de sal y de pimienta recién molida. Machaca con un tenedor hasta obtener una pasta homogénea.
- Extiende una fina capa de esta mezcla sobre cada lámina de calabacín, enrolla como si fueran makis y sujeta los rollitos con un palillo.
- Echa la crema de queso en un cuenco con 2 cucharadas soperas de agua caliente y bate hasta obtener una crema que pueda untarse fácilmente.
- Retira los palillos de los rollitos y unta delicadamente el exterior con la crema de queso.
- Echa en un plato hondo las semillas de sésamo y reboza los rollitos.
Presentación
- Coloca los makis en los platos de presentación, espolvoréalos con la guindilla picada y sírvelos fríos. Los puedes acompañar con un poco de salsa de soja.