Hace solo unos días logró eclipsar en los premios BAFTA a las estrellas más brillantes de la industria del cine con un diseño nupcial de escote asimétrico que convirtió a la Duquesa de Cambridge en una de las mejor vestidas de la alfombra roja. De vuelta a sus actos públicos, esta misma mañana recuperaba su estilo habitual, clásico pero no excesivamente sobrio. De hecho, para acudir a la conferencia Mental Health in Education por The Royal Foundation, ha sorprendido con un conjunto de tweed con silueta peplum que favorecía especialmente su figura y ahora, a última hora de la tarde, ha vuelto a acertar de pleno con un estilismo diferente. Mientras la reina Letizia y el rey Felipe VI se encuentran en una cena de gala en Rabat, Kate Middleton ha acudido a una cena de gala en Londres, a cargo de la organización 100 Women in Finance.
Para este acto, que ha tenido lugar en el Museo Victoria & Albert de la capital británica, la Duquesa ha escogido un vestido largo de aspecto vaporoso y manga corta. De color rosa empolvado de diferentes intensidades, incorpora un cinturón de terciopelo en burdeos, un detalle que estiliza su silueta y aporta movimiento y volumen a la falda. Otro de los elementos que más llama la atención del diseño es el escote, que se asemeja a las aberturas tipo barco que tanto gustan a Meghan Markle. Una propuesta de aire romántico que resulta muy diferente de los looks que Kate Middleton ha llevado en años anteriores a esta misma cena de gala, si bien repite un truco de estilo que sí pudimos ver en sus estilismos de ediciones previas: el cinturón. En esta ocasión, el accesorio va a juego con el bolso de la mujer del príncipe Guillermo, que ha culminado el vestuario con un modelo de mano de Prada, también de terciopelo y en color granate. Aunque el largo del vestido oculta los zapatos en muchas de las imágenes, la Duquesa ha optado por reutilizar un diseño de Oscar de la Renta en color blanco.
Fiel a su estilo, no ha apostado por un maquillaje demasiado elaborado. La hemos podido ver con una discreta sombra de ojos en color oscuro (tonalidad a la que recurre con frecuencia), mejillas melocotón y labios naturales. Respecto al cabello, que llevaba suelto y con ligeras ondas en su primera aparición del día, en la cena de gala ha optado por un semirecogido que mantenía el aspecto ondulado en la zona de las puntas. Como joyas, destacan los pendientes de la firma londinense Kiki McDonough, marca en la que también ha confiado esta mañana, aunque con un diseño distinto.
