Vestido camisero y taconazos de charol: doña Letizia no arriesga pero gana con su último look

La Reina recupera su versátil diseño floral y lo combina con accesorios totalmente diferentes para darle una nueva estética

Por Paula Callejo

Tras retomar la semana pasada su agenda oficial tras las vacaciones de verano (que este año ha pasado en Madrid junto a su familia debido a la crisis sanitaria), doña Letizia acude hoy a una reunión de trabajo en Madrid con una de las organizaciones a las que lleva apoyando desde hace años: la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). Para esta cita, la Reina ha vuelto a reciclar ropa de su armario -desde que ha iniciado el curso no ha estrenado- y ha optado por un look discreto pero favorecedor y de tendencia, muy apropiado para la ocasión. Con esta elección nos recuerda, además, cuál es su prenda infalible durante todo el año: el vestido camisero. 

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Diseño 'todoterreno'

En los últimos años, doña Letizia ha encontrado en el largo midi una elección ideal para todo tipo de ocasiones, algo que no nos sorprende porque los diseños a media pierna son también los preferidos de otras royals como Kate Middleton, puesto que aportan una dosis extra de sofisticación y atemporalidad. Concretamente, la esposa de Felipe VI adora los vestidos que se entallan a la cintura y potencian su de por sí esbelta figura, como es el caso de los camiseros, totalmente funcionales y versátiles. Estos modelos con cuello clásico y botonadura frontal suelen agregar una lazada regulable, por lo que favorecen a todo tipo de cuerpos (incluso a las mujeres embarazadas, como ya demostró Meghan Markle cuando estaba esperando al pequeño Archie) y, según los accesorios con los que se combinen, pueden resultar tan válidos para un acto de día como para una cita de noche. 

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En clave asequible

Hoy, la Reina recupera un vestido de este tipo que ya habíamos visto anteriormente, una pieza de Massimo Dutti confeccionada en un tejido azul marino con estampado floral en tonos pastel. Pertenecía a la colección otoño-invierno 2018 de la casa española, pero actualmente sigue siendo pura tendencia, por lo que no nos extraña que continúe poniéndoselo. La primera vez que lo llevó fue el año pasado durante uno de los actos más señalados del año para la Familia Real: la misa de Pascua en Palma de Mallorca. Aquel día, doña Letizia rompía con su propia tradición tras 15 años asistiendo con falda o pantalón a este evento, y estrenaba este vestido junto a unos sencillos stilettos a tono y una cartera de mano en tono teja. 

Hoy cambia todos los complementos, desde el cinturón, que sustituye por uno similar pero algo más oscuro, hasta los zapatos, puesto que escoge un par negro de tacón altísimo con tira cruzada en el empeine y acabado acharolado firmado por Magrit. En cuanto al bolso, opta por uno tipo sobre a juego de Carolina Herrera.

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Pieza exclusiva

Esta prenda forma parte de la colección de diseños modificados exclusivamente para ella que atesora la Reina, y es que, aunque se trate de un vestido perteneciente a una marca asequible que se encontraba a la venta con normalidad, ella luce una versión algo diferente. Tal y como se podía ver en la web en aquel momento, esta prenda contaba con una falda más larga, prácticamente a la altura de los tobillos. Sin embargo, ella pidió cortarla por debajo de las rodillas para lograr el corte midi que, como comentábamos, tanto le gusta.

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