Federico de Dinamarca participa en un experimento científico... ¡y acaba a carcajadas!

Este lunes visitó una escuela con motivo del Festival de la Ciencia

Por Lara Fernández

Federico de Dinamarca es un príncipe intrépido. Tan pronto se apunta a un duro entrenamiento junto a su hijo Christian, animados por Astralis, el mejor equipo del mundo en el popular videojuego Counter Strike, como que posa, sin reparo alguno, con los estragos del confinamiento en su pelo. Nada se le resiste, nada se le pone por delante y no duda en prestar su ayuda si así se le requiere. No en vano se le conoce como el 'príncipe Turbo'. Este lunes, el hijo de la reina Margarita visitaba la escuela Sophienborh, en Hillerød, y lo hacía por un motivo muy concreto. 

Deportista, familiar y muy intrépido: el 'príncipe Turbo' Federico de Dinamarca cumple años

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En estos momentos se celebra el Festival de la Ciencia que colabora con el HCØ2020. Este último es un gran evento científico con el que se conmemora, este 2020, el segundo centenario del descubrimiento, por parte del danés H. C. Ørsted, del electromagnetismo. Precisamente Federico de Dinamarca ha accedido a ser el patrocinador de la cita. Esta engloba exposiciones, cursos, conferencias, talleres, debates y otras tantas actividades didácticas con un claro objetivo: promover la educación técnica y científica para todas las edades, así como ayudar a que crezca el interés por la ciencia y la tecnología del futuro. 

El hijo de la soberana danesa fue recibido en la escuela por el director del centro, Jon Dinsen, que le explicó que estos días han centrado las celebraciones en los 'Grandes descubrimientos'. Así, varios colegios han trabajado con innovaciones en el mundo de la ciencia y diferentes experimentos. Minutos después, Federico de Dinamarca pudo conocer de primera mano algunos de los proyectos de los estudiantes, en los cuales se mostró muy interesado.

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Al final de su visita, el príncipe heredero se animó a participar en uno de estos experimentos sobre electromagnetismo, que se desarrolló en el patio de la escuela. Ante la atenta mirada de los alumnos, ataviados con las pertinentes gafas y batas, Federico de Dinamarca se encargó de colocar bien los cables dentro de los correspondientes conductos a fin de que el experimento saliera perfecto.

Lo cierto es que no sabemos cuál fue el resultado final del mismo, pero sí pudimos ver es al hijo de la reina Margarita disfrutar de lo lindo con la prueba, tanto es así que terminó a carcajadas, haciendo gala de su sentido del humor. Al parecer, al heredero le divirtió mucho revivir sus días como escolar en este centro en el que, además, sacó su vena más científica junto a los escolares allí presentes.