Lugares mágicos para pasar el gran puente de diciembre

No queda nada para que llegue y ¿sigues sin planes? Junto al mar, en plena naturaleza, en la ribera del Ebro o en la capital gallega. Tenemos los destinos perfectos para tu próxima escapada. Será por ideas.

Por HOLA.COM PARA PARADORES

BAIONA

Nos vamos a Galicia, porque apetece descubrir en las Rías Baixas una villa medieval con tanto encanto como Baiona. Por sus calles estrechas y empinadas, por su colegiata de Santa María, pero, sobre todo, por su emplazamiento, en una amplia ensenada señalada por la península de Monterreal, en la que despunta la monumental fortaleza que hoy acoge uno de los establecimientos más singulares de Paradores. Sentarse en sus salones señoriales, despertar en una de sus espaciosas habitaciones mirando al océano, pasear por sus murallas y jardines o tomar algo frente a los más de dos kilómetros de paseo marítimo viendo batir las olas, su fachada marítima de galerías acristaladas y, un poco más allá, las Islas Cíes, no puede ser mejor plan para este puente de diciembre (https://www.parador.es/es/paradores/parador-de-baiona).

VER GALERÍA

VER GALERÍA

TORTOSA

En la ribera del Ebro, Tortosa, en Tarragona, invita a una escapada inolvidable. Tiene un patrimonio monumental apabullante –la soberbia catedral de Santa María, sus Reales Colegios renacentistas, la Llotja del Mar, los palacios, los jardines del Príncipe…–, pero el que marca el perfil de este lugar conjunto histórico es el impresionante castillo de la Zuda, que acoge el Parador de Tortosa (parador.es/es/paradores/parador-de-tortosa) y domina la ciudad desde lo alto. En este lugar construido por el rey Abderramán III es fácil sentirse parte de la historia contemplando sus techos abovedados, sus ventanales góticos, sus vidrieras policromadas, sus muebles antiguos, sus vistas… pero con todas las comodidades de hoy en día.

VER GALERÍA

CERVERA DE PISUERGA

Las montañas del norte de Palencia son un espacio de naturaleza y arte fascinante. La carretera que lleva desde Cervera de Pisuerga y el puerto de Piedrasluengas, por donde baja el recién nacido río Pisuerga, no solo es la más bella de cuantas unen la vieja Castilla con Cantabria, es una propuesta de escapada que deja boquiabierto, porque en el camino surgen miradores, templos románicos espectaculares, tejos milenarios y hasta osos pardos.

Para alojarse, ningún lugar mejor que el Parador de Cervera (parador.es/es/paradores/parador-de-cervera-de-pisuerga), ubicado en plena naturaleza, desde cuyas habitaciones se admiran unas vistas privilegiadas al pantano de Ruesga y a los picos más altos de la Montaña Palentina.

SANTIAGO DE COMPOSTELA

La capital Compostela apetece en cualquier momento, por supuesto, también para el puente de diciembre. Siempre hay nuevos locales por conocer, nuevas perspectivas de la catedral, museos, tiendas de diseñadores locales… Y no hay un lugar más exclusivo y privilegiado que el Parador de Santiago (parador.es/es/paradores/parador-de-santiago-de-compostela), el que fuera antiguo Hospital Real de Peregrinos que abre sus puertas en la misma plaza del Obradoiro, un alojamiento-museo, con cuatro preciosos claustros, elegantes estancias, espectaculares habitaciones y un señorial restaurante.

VER GALERÍA

LA SEU D’URGELL

Para amantes de la alta montaña, el entorno de la localidad leridana de La Seu d’Urgell, no puede resultar más atractivo, con el Parque Natural del Cadí-Moixeró, el del Alto Pirineo, el Parque Nacional de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici y también muy cerca, las estaciones de Andorra, La Molina y Masella. Ahora que ha comenzado a nevar, puede ser una propuesta perfecta para el puente de diciembre.

VER GALERÍA

El Parador de La Seu d’Urgell (parador.es/es/paradores/parador-de-la-seu-durgell) es una buena base para descubrir esta desbordante naturaleza. Se encuentra al lado de la catedral románica y gusta de él su elegante y moderna decoración, la piscina cubierta, la sauna y las especialidades gastronómicas que se sirven en el antiguo claustro del convento de Sant Domenec, desde la escudella barrejada al jarrete de bruneta con pasas.

VER GALERÍA

NERJA

¿Y una escapada a la Costa del Sol? En Nerja, la localidad que se asoma al Mediterráneo por el Balcón de Europa, en esta época más que sus playas y calas o la excursión en kayak que bordea sus bellos acantilados de Maro, se llega buscando su famosísima cueva, una de las más sorprendentes de la península, y sus panorámicas.

VER GALERÍA

Las que se admiran desde el Parador de Nerja (parador.es/es/paradores/parador-de-nerja), rodeado de un espléndido jardín y sobre un acantilado, no tienen precio. Para complementar la estancia, nada como sentarse a la mesa de su restaurante y probar alguno de sus platos de la cocina tradicional andaluza –espetos de sardinas, los boquerones, fritura de pescado…–, una deliciosa experiencia gastronómica.

VER GALERÍA

BENICARLÓ

Buscando lugares tranquilos, con buen clima y junto al mar, la localidad castellonense de Benicarló es una buena idea para el puente. En la misma orilla de la playa está el Parador de Benicarló (parador.es/es/paradores/parador-de-benicarlo), un lugar confortable para relajarse unos días sin pensar más allá que en levantarte cada mañana frente al Mediterráneo, pasear entre palmeras por el jardín, pisar la arena, apuntarte a alguna actividad en la estación náutica Benicarló, acercarte a Peñíscola y, para comer o cenar degustar, un delicioso arroz de la carta de su restaurante.

Más información
Paradores