Verdes (como el de esta propuesta de Ballingslôv), neutros, rosas o rojos se cuelan en la cocina dispuestos no solo a conquistar el diseño, sino también nuestros corazones con su alegría y su fuerza. Además, dado el papel de esta estancia como centro de operaciones sociales de la casa, donde se vive y se disfruta con familiares y amigos, el color consigue darle un mayor protagonismo visual, proporcionando un plus ‘deco’ a un espacio funcional. Esto no significa que las cocinas blancas no estén de moda, sino que hay vida más allá del ‘white’ y que la convivencia de ambas tendencias decorativas es posible. Teniendo en cuenta que “suele ser la estancia con más muebles por metro cuadrado, elegir el tono de estos suele ser una decisión de peso”, apuntan desde AMC (Asociación de Mobiliario de Cocina). Por eso no te precipites y busca siempre una opción a tu medida.
Lee: Las cocinas en color negro triunfan en 2020