IMPRESCINDIBLES
La mejor panorámica de la Acrópolis y su edificio más importante, el Partenón (447-438 a. C.), la puedes contemplar desde la colina de Filopappos, en el centro de la ciudad.
Fíjate, según se entra, en los Propileos, que eran la grandiosa entrada a la Acrópolis y detente en el templo de estilo jónico de Atenea Niké, construido para conmemorar la victoria de los griegos en la batalla de Salamina.
Pero la Acrópolis es mucho más que el Partenón. El templo de Erecteion (en la imagen), con su tribuna sostenida por columnas en forma de mujer conocidas como cariátides, merece una foto, mejor aún al atardecer.