Ingredientes
- 300 g harina
- 3 ud huevos
- 20 ml aceite de oliva virgen extra
- 200 g queso mozzarella fresca
- 100 g queso gouda picado
- 30 g queso parmesano
- 50 g queso crema
- 110 g nueces picadas
- Albahaca fresca
- Perejil fresco
Preparación
- En un bol, añadimos los huevos y el chorrito de aceite de oliva virgen extra. Mezclamos y agregamos la harina. Con una cuchara, integramos bien hasta formar nuestra masa.
- Retiramos del bol y amasamos hasta conseguir una textura suave y homogénea. Dejamos reposar unos 20 minutos, en el mismo bol y tapada con un paño limpio.
- Mientras, en un bol aparte, mezclamos todos los quesos junto a 100 g de nueces picadas. Reservamos.
- Trabajamos la masa de nuestros raviolis en una superficie lisa, consiguiendo una capa bien fina de 2 mm de espesor y en forma de rectángulo alargado, de unos 15 cm de ancho. Sobre él, en la parte inferior, ponemos montoncitos de nuestro relleno de quesos y nueces, dejando entre uno y otro un espacio de unos 2-3 cm. Cerramos el rectángulo volviendo parte de la masa sin relleno hacia la parte que hemos rellenado, tapando bien y presionando con las manos para que no quede aire. Podemos usar un poco de agua para que la masa se nos pegue mejor. Cortamos los raviolis.
- Cocemos los raviolis en agua hirviendo con sal durante 30 segundos, muy poco tiempo, pues es pasta fresca.
- En una sartén, ponemos el perejil con un poco de aceite de oliva virgen extra y echamos los raviolis, según vayamos sacándolos de la olla con agua. Damos un golpe de calor, viendo que se doran ligeramente y retiramos.
- Servimos con hojas de albahaca fresca y el resto de las nueces picadas.